No deben comer mecánicamente, deben preguntarse si los alimentos que consumen tienen la calidad energética que necesitan para que su cuerpo tenga esta nueva energía.
No es lo mismo comer para saciarse que comer con la consciencia de que están nutriendo su cuerpo, que están alimentando a un mundo compuesto por células, compuesto por órganos que tienen también su espíritu, que forman también parte de esta creación.
Se les olvida que su cuerpo no es un robot. El cuerpo reacciona ante la nueva energía, deben ser conscientes de que es un ser vivo que hay que cuidar y alimentar adecuadamente para que evolucione.
También hay que tener consciencia de que la Madre Tierra es un ser vivo que hay que cuidar y alimentar adecuadamente. La nueva energía no permitirá que sigan viviendo sobre ella como parásitos, solamente alimentándose de las energías que les rodea pero sin formar parte de ellas, sin devolver agradecimiento por el aporte que se les presta.
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